7.17.2009

ACUÉRDATE DE MÍ

Estaba pensándolo desde ayer en la noche (miento, porque fue desde hoy en la mañana y no lo estaba pensando, sólo lo recordé, y supuse que talvez no lo aguantara), cuando vibró un celular. Era el mío. Que no sean malas noticias sería suficientemente bueno (no fueron malas noticias y me alivia, si lo tengo que confesar).



...



Bueno, ya me voy...
Ah! me volteó a ver desde la poca altura que alcazaba, sentado sobre las losetas viejas de la casa de su abuela , ¿Te vas a ir con él?
Pues ya te había dicho.
Bien. Me quedé esperando qué iba a decir, con la mirada interrogante ¿Vas a abrazarlo?
Sí.
—¿Vas a tomarlo de la mano?
comenzaba ya a hacer esa cara de no entiendo porqué coño me preguntas esto.
¿Vas a decirle que lo quieres?
—Y... dudé un poco Sí. Me veía de un modo que me dejaba bastante claro que la idea no le parecía, y que ya comenzaba a creer, que de verdad me valía madres.
Bien... me dijo, con un tono tan tajante que no me dejaba atisbar otra cosa que resignación. Dejó pasar unos segundos, para volver a digerirlo todo. Voletó a verme, como si en realidad estuviera esperando yo la respuesta. Bien.
Bien, entonces. Recliné mi cuerpo hacia el suyo y atrapé sus labios carnosos entre los míos. Lo besé lento, suave, como si jugara con el sexo de una mujer Me voy.





Era Chico.Me llamó para decirme que ayer lo dejé plantado, y de repente lo entendí todo: las interrogaciones en la madrugada de hoy por parte de uno de los hombres de mi vida, el que Chico no me hubiera llamado a la noche anterior, la desaparición de un amigo... todo. Eso no puede estar bien, y esta bedería ser una entrada del otro blog.

2 comentarios:

Ros dijo...

este post hoy sirvió de ventana para conocer un poquito del otro blog.
tan sensual tú.

amo tus post. neto.


:)

Michelle dijo...

¿cuál otro blog?
Lilibeth, hoy te respeto un poquito más. De hecho, hoy ya no eres lila, hoy eres Lilibeth, con el mismo cariño pero más admiración.